Sinners Dream [Afiliación normal]

Shape of blood: Sinners dream

¿Alguna vez has deseado tener muchísimo dinero?
¿Qué tal fama y gloria?

Riquezas más grandes de lo que podrás llegar a gastar en vida, lujos ¿alguna vez as soñado con tenerlo todo?

Que estarías dispuesto a hacer, si yo, el Dios de mi propio mundo, estuviera dispuesto a cumplir con tu ambicioso deseo.
Veo que tengo tu atención; Muy bien te sugiero que me escuches con detenimiento porque no voy a repetírtelo, este es mi relato, la historia de cómo me convertí en el artesano de mi mundo, la historia de cómo comencé mi juego.

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Con más dinero del que podría haber gastado en varias vidas, los días llenos de alcohol, sexo y excesos no tardaron en volverse monótonos y aburridos, la mejor comida sabia a arena, el mejor licor no alcanzaba a interesarme, y ni el mejor de los acompañantes podía cautivarme más haya de unos minutos, y esto se repetía una y otra vez al compás de las lentas manecillas del reloj.
¿Qué caso había en gastar así mi tiempo, es que acaso no había nada más?

Y pensando en ello, fue que se vino a mi mente algo macabro, refrescante, un juego lleno de variables y sumamente oscuro, pero infinitamente entretenido, bien al menos para mí, el cabecilla que lo vería todo dese arriba y nunca más volvería a embriagarme en la monotonía de un mundo suntuoso;

En medio de la abandonada Antártida y la menospreciada Oceanía encontré mi tablero, una isla que me fue entregada sin preguntas luego de que hablase el dinero. Y aquí nació finalmente aquel macabro baile entre peones y alfiles jugando secretamente a ser cazados.

Sin embargo, mi juego, el centro de mi mundo en el que solo yo reino, no fue por mucho tiempo un secreto, luego de que sobreviviera el primer campeón, algo que un servidor no había previsto aconteció. Mientras que mi parte ofrecía poco más que lingotes de oro y telas de seda, riquezas como tales con esa simple sencillez, El primero luego de haber ganado mi juego se dio a conocer en el oscuro mundo en el que yo tan bien me desenvuelvo, fama en infamia le llenaron desde todos los costados, el nombre del primero se dio a conocer con la velocidad de un trueno, y justo a su lado creciendo en proporciones abismales estaba mi nombre. El nombre de aquel magnate sádico que había empezado tan oscuro recreo, el nombre del que se regodeaba mirando a los peones correr como cucarachas en busca del dinero y el poder.

Y como abejas al a miel, poco a poco vinieron llegando a mí, a pesar de haber querido mantenerlo como mi propio oscuro e impúdico secreto, a pesar de haber comprado a mis juguetes en las áreas más recónditas de los mercados negros, aun así comenzaron a llegar, algunos suplicantes, otros altivos, pero al final del día, todos eran iguales, todos buscaban la fama del primero, todos buscaban el dinero que solo yo podía otorgarles, el poder, el ostentoso título que estaba dispuesto a darles.

Recibí tantas suplicas, tantas solicitudes, que me vi sorprendido de mí mismo y mis labios se curvaron al ver la magnitud de la avaricia humana, pero luego de un par de partidas, me di cuenta de que si iba a abrir mis puertas a extraños las reglas debían cambiar ligeramente, ya que de otra forma las pérdidas humanas iban en crecimiento y eso, ocasionaba en mi un terrible aburrimiento, sin mencionar que muchas veces perdí a mis peones favoritos, antes de lo que yo consideraba cuerdo.

Y así se dio a conocer, en el bajo mundo como el juego del conejo, un juego temido con una reputación sucia y baja, mas sin embargo los participantes se daban a conocer solo con formar parte de él, como caballeros valientes y sin nada que perder, la gloria que le espera a los ganadores ni siquiera yo puedo explicarla.

¿Cómo suena esto para ti?
Tener el mundo en tus manos, bañarte en la sangre de los débiles que apastaste en el camino, tener más riquezas que un rey, más fama y más gloria que un héroe.

¿Qué estarías dispuesto a hacer para ganar el primer premio?, ¿Que arriesgarías para tenerlo todo? ¿Tu mente? ¿Tu cuerpo? ¿Tu vida?
Y bien…


¿Quieres jugar conmigo?

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