Festival de otoño "Milanesa con Papas" EVENTO Tema C

por **Kreios** Lun Jul 16, 2012 1:48 am

Festival de otoño
"Milanesa con Papas"

TEMA A:

La ciudad contaba con varios caminos hacia las afueras, aquel en especial era la mejor ruta para llegar al pueblo en el cual Kreios había decidido colocar el centro del festival. Por todo el camino había rótulos con flechas indicando el camino, además de pequeños puestos con muestras de alimentos o artículos en venta del evento. Las decoraciones resaltaban dispersas a ambos lados del camino además de un par de sujetos vestidos con enormes trajes de papas que a simple vista se notaba tendrían calor cuando el sol estuviera en su punto más fuerte. Cortinas de luces de pequeños focos se extendían a lo largo del camino, aunque se encontraban apagadas por la hora. A la mitad del camino había además un pequeño escenario en el cual se podían escuchar diferentes artistas amenizando un poco el recorrido. Desde aquellos con buena voz hasta conjuntos más numerosos que tocaban bastante bien. El escenario del punto central estaba para aquellos más conocidos, pero eso no significaba que los que representaran ahí fueran malos, solo no eran tan famosos y se podía decir que era una buena oportunidad para darse a conocer.

REGLAS

Pueden entrar y/o dejar el tema cuando quieran, al menos durante la duración del evento que es desde el 16 de Julio al 17 de Septiembre a menos que haya algún cambio en cuyo caso avisare.
Si el evento termina y ustedes no han terminado su trama como el tema será cerrado, podrán continuarlo en un tema nuevo creado por ustedes.
Pueden participar cuantos personajes quieran, cada uno desde su respectiva cuenta obviamente. Respecto a esto no hay limite mientras sean responsables.
NO habrá turnos. ¿Por qué? Porque así si uno no responde el tema no muere y simplemente podemos ignorarle. Por lo tanto pueden responder en el momento que quieran.
Como el post que hagan puede estar destinado a cualquiera, o específicamente a algun pj presente se usará el siguiente código:
Código:
[font=Verdana][size=18][color=#ff8400]NOMBRE (s) DEL PJ DE QUIEN VA DIRIGIDO[/color][/size][/font]
. Lo ponen al final de su post pero que sea visible, así si el usuario no lee los post de todos puede saber que hay uno para su pj. Si no lleva este código se tomara como que cualquiera puede responderle, igual cualquiera puede involucrarse en la trama de otros aunque los post estén marcados pues no es un tema privado.
Hay tres temas que corresponden al evento, los tres temas tienen las mismas reglas.
Cada pj puede estar solamente en uno de los tres temas a la vez, pero pueden cambiarse cuando quieran colocando
Código:
[color=#f21111]CAMBIO DE TEMA[/color]
que cambian de tema. O que abandonan el evento. Eso solo para saber si un pj ya no está participando.
NO es permitido nada +18, gore o similares en los temas del evento, si su trama da a eso pues deberán crear su propio tema aparte debidamente identificado y seguirlo ahí. Eso no significa que no puedas “saltarse” eso y seguir participando también en el rol del evento. Como dije es atemporal y pueden continuarlo con ese pequeño salto te tiempo. Solo indiquen en su post que lo continuaron en otro lugar y ponen el link.
Amos o pet participan por igual, si los pet no poseen amo y/o están en echotier solamente deben narrar como escaparon o convencieron a alguien de que los llevaran, en su primer post. La seguridad durante el evento será baja, así que no les seria difícil escapar, casi que pidiéndolo pueden salir de Tierladen
No es obligatorio que un amo asista con su pet, pueden ir individualmente.
No me gusta limitar el largo de post a nadie, pero por comodidad y agilidad lo que participen traten de mantenerse entre 10 mínimo y una cantidad aceptable. Comprendo que alguno se alargue en alguno, pero traten de mantenerlo lo mas directo para que las respuestas sean fluidas entre los participantes
Si alguien incumple alguna regla simplemente editare su post poniendo una advertencia y eliminando el contenido.

A lo largo de los dos meses del evento puede que haya cambios en el mismo, como por ejemplo el clima, hora o actividades especiales que se me ocurran para darle un giro al evento. Colacare las modificaciones en cada uno de los temas con un código de cita, y en el tema principal de información

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Evento oficialmente abierto.
Libre ingreso a todos.

por **Queen of Hearts** Lun Jul 16, 2012 10:39 pm

Su silueta elegante se movía por lentamente por el camino que conducía a aquel claro en el bosque, su mirada ni siquiera se desviaba una milésima del frente. La verdad es que no tenía interés en una actividad tan común como aquella ridícula celebración, pero debía hacer acto de presencia. Claro que jamás admitiría su desagrado, conocía las maneras del mundo. Además quizá podría encontrar algo interesante digno de su persona, pero muy seguramente no.

Eligió el claro porque había notado que no habían muchas personas, y eso era agradable. Se dirigió a un tronco de árbol que mostraba las señales de haber sido cortado no hacía mucho tiempo y poseía una superficie plana perfecta para el uso que le dio, se sentó en él. Con las piernas cruzadas como una dama y las manos sobre sus piernas observaba los alrededores, iba a ser un largo y aburrido día al parecer. Dejó su hermosa hoz de hoja roja a un lado, cerca para que nadie la tocara pero alejada para que no le estorbara, sacó su baraja de naipes, aquella que siempre mantenía y nunca utilizada, procediendo a revisarla como si cada carta tuviera algún significado en especial hasta llegar a la Reina de corazones la cual se quedo observando. Su mente podía estar algo perdida, pero su posición pese a lo peculiar que resultaba en un hombre dejaba ver un aura dominante y de realeza, atrayente pero intimidante. Aún comenzaba aquella actividad… y no tenía idea de como gastaría tanto tiempo libre, aunque se suponía que estaba ahí por trabajo este apenas alcanzaría para distraerlo.

por **Renzo Ashtorm** Sáb Jul 21, 2012 2:57 pm

Había asistido al evento solamente por la comida, el bullicio no le gustaba para nada y ese grupo tocando a mitad del bosque le ponía los nervios de punta. Y él que había pensado que ahí podría encontrar algo de paz. Intentó alejarse un poco más, adentrándose en el bosque caminando todo lo rápidamente que todos los envoltorios de comida que traía entre los brazos le permitían.

Guarniciones de papas, carne, envoltorios de chocolatines y cajas redondas llenas de bombones confitados eran su botín, apenas podía vérsele la cara por la montaña de comida que apretaba contra su pecho como si de un bebe se tratara. Tropezó con una piedra por la poca visibilidad que tenía y una de las cajas cilíndricas que traía entre las manos fue a parar a los pies de un hombre que se encontraba sentado a unos cuantos pasos de distancia sobre el tronco de un árbol.

Renzo bufó con pesar. — ¡Lo que me faltaba! —gruñó para si mismo mientras se encaminaba para recoger su preciado paquete.

Queen of Hearts

Spoiler:

por **Queen of Hearts** Lun Jul 23, 2012 5:30 pm

Enarcó una ceja de forma sutil cuando algo tropezó con su persona, aunque logro moverse apenas lo suficiente para que nada callera sobre su persona, eso era lo único que a él le faltaba. No hizo ni el menor esfuerzo por moverse a ayudar a lo que tropezó con él, pero si para poder observarlo mejor. No podría haber mencionado absolutamente nada que le atrajera de aquel, para su gusto era como un simple bulto que acababa de ir a dar al suelo. Un bulto al que agradablemente habría decapitado sino tuviera que apegarse a las reglas de Luxcya donde al menos de momento no tenía razones fuertes para hacerlo.

Se levanto finalmente acercándosele y tomándolo del mentón para verlo antes de picarle la frente. –Bueno al parecer tienes ojos, y si los tienes son para ver. Si algo en verdad te falta es saber como usarlos porque de lo contrario ellos te usaran a ti.- Lo soltó mientras con dos de sus dedos tomaba uno de los bombones que se había salvado del incidente y lo observaba sin decidirse a comerlo. -¿Estás bien?- Le sonrió amigable como si en verdad tuviese algún interés en ser su amigo, pese a que no planeaba ayudarle.

Renzo Ashtorm

OFF:

por **Renzo Ashtorm** Lun Jul 23, 2012 11:21 pm

Bufó con enojo ante la acción del hombre frente a él y retiró su rostro de entre sus manos de un tirón, como si le diera asco el simple roce de sus dedos. Volvió el rostro hacia todas partes, esperando que no hubiera testigos, después de todo aquello no dejaba de ser humillante.

Gracias a Dios, estaban completamente solos, entonces apretó los puños con rabia y se levantó lo más rápido que pudo, irguiéndose amenazadoramente, después de todo si de algo le servían sus más de dos metros de alto, era para intimidar a la gente.

—Estoy perfectamente —le respondió, ignorando olímpicamente todo el comentario anterior por parte del castaño—. Y si mal no recuerdo, eso que estas a punto de meterte a la boca me pertenece— continuó, estirando la mano en dirección a su acompañante, dispuesto a que se le devolviera lo que era suyo por derecho. ¿Infantil? Tal vez, pero a él le daba lo mismo, después de todo la hostilidad provino de aquel hombre primero y no era como si Renzo disfrutara siendo amable con los demás.

Queen of Hearts

Spoiler:

por **Queen of Hearts** Mar Jul 24, 2012 12:06 am

Y sin ningún disimulo observó el intento del otro por intimidarlo. Negó apenas sin dejar de lado su porte y soberbia. –Si tu mente esta dominada por tu cuerpo déjame decírtelo, más tamaño no es signo de nada más que peso.- No se podría decir que no sonara irritante, el vampiro se sabía superior aunque no tuviera ninguna relación con sus razas. –Además si planeas intimidar a un juez de Luxcya debes saber que perderás la cabeza de entre tus hombros… y no lo digo metafóricamente.- Notando la mano del otro, más que su comentario abrió la boca introduciendo el bombón de una forma seductora por pura necesidad de provocarlo, aunque fuera para pelear. Él no era infantil, simplemente reclamaba lo que consideraba suyo.

-El responsable de un incidente debe hacerse cargo, agradece que me conforme con algo de tan mal gusto como lo que me comí.- Bostezó cubriendo su boca en un gesto más que cuidado. Se aburría, pero no precisamente por el lobo. –Deberías disculparte como mínimo… hincarte y besarme las botas o pedirme perdón públicamente. Pero hoy no es día para formalidades. –una risa de gracia salió por entre sus labios acomodándose mejor. Era dificil saber lo que en verdad pensaba, simplemente porque era imposible llegar al fondo de su mente sin sentido-

-Además no soy tan cruel. Si gustas puedes quedarte conmigo, hoy casi nadie se me acercara por miedo a romper alguna ley y que los juzgue. Soy el famoso Queen of Hearts, no a tus servicios claro.- Hizo apenas una reverencia con la cabeza muy ligera, esperando el nombre del otro por cortesía. Aunque siempre podía averiguarlo de mala manera de ser necesario.

Renzo Ashtorm

por **Renzo Ashtorm** Mar Jul 24, 2012 1:01 am

—No esperaba intimidarte, conozco a los de tu clase—le dijo, y era verdad, Renzo había peleado con muchos vampiros en su vida como caza recompensas y ninguno había sido fácil de vencer—. Además yo diría que el que esta dominado por la apariencia es otro, ustedes los vampiros son las creaturas más vanidosas que he conocido en mi vida—continuó.

Tenía el seño fruncido y sus colmillos saltaban a la vista, estaba realmente enfadado, si había algo que odiara más que el hedor que despedían los vampiros era encontrarse a uno que además fuera soberbio.

—¿Porqué habría de tenerte miedo? Que seas un juez no significa nada para mi, puedes ser incluso el mismísimo alcalde de esta ciudad y me daría exactamente lo mismo—dijo con enojo. Fue entonces que Queen se metió el chocolate a la boca, su chocolate. Sintió que la sangre le hervía y estuvo a punto de lanzársele al cuello, pero se contuvo. Aquel era de los pocos lugares en el que no se le buscaba, había cometido demasiados crímenes por lograr sus cometidos, no quería perder su preciado escondite. Ahí, en esa isla, había encontrado un poco de paz, no estaba dispuesto a perderla por un idiota.

—Hmmp —gruño al escucharlo hablar sobre pedir perdón—. Estas muy equivocado si piensas que me voy a inclinar ante ti solamente porque me lo ordenas, no he cometido ningún crimen ni faltado a ninguna ley, así que no puedes obligarme—le dijo cruzándose de brazos y cerrando los ojos para mantenerse en calma.

Cuando abrió los ojos después de unos segundos observó como el hombre frente a él inclinaba la cabeza al presentarse y sopesó que tan conveniente sería darle su nombre. —Renzo —escupió al fin aún molesto, aunque había cedido por pura conveniencia, por no quedar expuesto a la sospecha. No conseguiria nada más de él, por lo menos no por ahora, no por las buenas.

Queen of Hearts

por **Queen of Hearts** Mar Jul 24, 2012 10:19 am

Negar que aquella confianza mostrada por Renzo o su forma de hablar sobre los vampiros no le causo algo de gracia habría sido mentir, pero también lo habría sido comenzar a reír como si en verdad lo fuera. Si algo le había molestado desde que llegara a aquella ciudad era la facilidad con la cual era reconocida su raza. –No te confundas, mi… condición no tiene nada que ver con o que digo. Tampoco trato de dominar nada. Es mi trabajo aclarar las cosas y lo hago por costumbre aunque para tu pequeña mente pueda parecer algún tipo de amenaza.- No se mostraba ofendido, en realidad se lo tomaba demasiado tranquilo para lo que le desagradó. –Aunque supongo que hasta algún punto aquí eso si sea una amenaza, aun es difícil acostumbrarse.-

Sonreír victorioso, siempre conseguía lo que quería aquella no sería la excepción, no lo fue. Pero había un pequeño error que debía hacerle notar al otro. Con un movimiento ágil y rápido tomo su guadaña del suelo llevando su filo cerca del cuello de aquel, tan solo apoyando la punta en su piel. Podría haberlo herido fácilmente, pero la forma en que dominaba el objeto era tan precisa que apenas tocaba su piel. -¿Quién hablo de miedo? Solo dije que si intimidas a un juez, al menos a mí podrías perder la cabeza. No fui yo quien menciono tal sentimiento, eres tu quien asume que algo tan simple como eso puede causarlo.- Alejo nuevamente su arma reposando la parte de atrás en el suelo y usándola como soporte. –Sin embargo hablar del alcalde es otra cosa… no es del tipo al que se le teme, aunque tampoco del que se provoca.-

Se levantó nuevamente acortando la distancia con el otro, para tomar nuevamente un bombón y comerlo. No le gustaban, simplemente disfrutaba ver la molestia del cachorro. –Pero hacerle entrar la razón a uno de los tuyos es perder mi paciencia, tienen un carácter demasiado irritable para mi gusto.- Le dio la espalda comenzando a caminar, no le interesaba siquiera aquel sujeto tenía planeado atacarlo o no, igual no creí que sería capaz de herirlo. –Ah y una cosa… si planeas decir que no has cometido crímenes no lo hagas a un vampiro… el olor a sangre en ti lo siento desde lejos. ¿O me crees tan patético como un cachorro de los tuyos lo-bi-to?- No tenía ningún problema con lo que el otro fuera, pero ser amable con alguien de su carácter era aburrido, mejor provocarlo aún más.

Renzo Ashtorm

por **Renzo Ashtorm** Mar Jul 24, 2012 4:21 pm

Se puso en guardia en cuanto sintió la guadaña sobre su cuello, sin embargo no sintió miedo, había estado en peores situaciones a lo largo de su vida y esa no se acercaba para nada a ninguna de ellas.

—Sería una pena perder ante alguien como tú— le dijo mostrando los dientes, sus ojos violeta brillaban con furia a pesar de que su posición corporal decía que se encontraba un poco más sereno.

Había olvidado que los Vampiros también tenían un olfato bastante delicado, especialmente cuando se trataba de detectar el olor a sangre. Se reprendió por ello, exteriorizando su frustración con un gruñido. Sin embargo se tranquilizó nuevamente, dejando escapar un poco de su enojo en un bufido. No se había ofendido por el poco respeto que el hombre mostraba por los de su raza, a él tampoco le agradara mucho ser parte de aquella gente maldita. Observó como tomaba otro de sus bombones con molestia, pero no se lo impidió. En cambio pensó que la mejor manera de vengarse era ir contra lo que el hombre esperaba que hiciera, tal vez tuviera un genio de los mil demonios pero no era un idiota.

Esta vez fue él el que hizo gala de su rapidez y agilidad, se acercó por detrás al vampiro y lo tomo del mentón con su mano izquierda mientras que su brazo derecho se envolvía en su cintura. —Aun así, nunca he cometido un solo crimen dentro de esta isla—dijo con calma, y estaba diciendo la verdad, jamás durante todo el tiempo que llevaba viviendo en aquel lugar se había atrevido a violar alguna ley—Así que, estoy fuera de tu jurisdicción—susurró esta vez cerca de su oído, aunque para esto había tenido que encorvar un poco su cuerpo debido a su gran estatura. Su aliento era fresco pero su cuerpo despedía un calor contrastante al de la temperatura del vampiro, además había cometido un error, una de las mangas de su camisa se había rasgado al caer al piso y dejaba a la vista varias de sus horribles cicatrices, si se hubiera dado cuenta a tiempo no se hubiera acercado tanto.

Se alejó unos cuantos pasos inmediatamente después con la misma velocidad, aun sin percatarse de la prenda, más bien se había retirado por precaución, después de todo sabia de lo que los vampiros eran capaces. —¿No te gustan los perros? Es una lástima rata con alas, yo tenía entendido que todo el mundo ama a los cachorros—. Le dijo con sorna, mostrando una pequeña sonrisa de lado. Si el vampiro quería jugar a las provocaciones, él estaba dispuesto a seguirle la corriente.

Queen of Hearts

por **Queen of Hearts** Vie Jul 27, 2012 12:56 am

Jugar con las personas, manipularlas. Era simplemente un pasatiempo para él, pero al mismo tiempo eso era toda su vida. Ciertamente estaba provocando al lobo, pero al mismo tiempo no pretendía del todo una pelea. Era un vampiro, pero odiaba esas burdas demostraciones de fuerza por motivos estéticos simples: odiaba el rojo, la sangre es roja. Roja como su ropa, como su tatuaje, como todo en él. Lo odiaba pero seguía viéndose a si mismo bañado en rojo, se odiaba y sin embargo eso era imposible. Por eso aunque se habría conformado con una cosa así de un licántropo en realidad había disfrutado más ese contacto.

La sensación de un cuerpo con vida, quizá era eso lo que le hacía una y otra vez actuar fingiendo interés por conocer a las personas. Pero eso era mentira también, sabía que era simplemente porque sí. –Aún. Aún no estas en mi jurisdicción pero cuando lo hagas prometo ser justo contigo como es mí deber. –Apenas recorrió con el índice de su mano derecha, pues con la otra portaba su arma, el cuello de aquel antes de que se alejara. –Tu cabeza será una buena adición a mi listado. Aunque de momento me gusta más como está en su lugar.- Se arregló su sombrero que se había movido un poco por las imprudencias del otro y lo observo.

-Yo no soy todo el mundo. ¿Para que conformarme con un cachorro llorón para cuidar si puedo conseguir un fiel perro que me cuide a mí? Tu mente es demasiado simple… -Sonrió sin poder evitarlo acompañado de una mirada seductora tan común en él antes de parpadear y borrar todo rastro. Estaba trabajando supuestamente, no era tiempo de andar jugando con un extraño como otros días y menos en un lugar publico. –Ni siquiera puedes usar mi nombre en lugar de ese ridículo nombre, ¿o ahora ves alas en mi?- En realidad hacía tiempo que él tampoco las miraba, pero trato de alejar su mente de esos pensamientos pues pasado era pasado, no comenzaría ahora a ver hacia atrás.

-Pero supongo que no puedo esperar mucho de un perrito sarnoso- señalo indiscretamente las cicatrices que habían sido visibles cuando se acercó. Claro que era cruel, pero por alguna razón la única forma de comprenderse con una bestia sin modales es hablar en el lenguaje de una. Ese era su punto de vista. –¿O acaso tu viejo amo no supo cuidar de su cachorro?- No pretendía nada con ese comentario, ni siquiera tenía idea de como había obtenido esas marcas. Pero las cicatrices suelen venir siempre de una segunda persona, al menos la de ese tipo.

Renzo Ashtorm

por **Renzo Ashtorm** Vie Jul 27, 2012 2:27 pm

Aún sentía un escalofrió recorrer su espina dorsal por el contacto que el vampiro había tenido con su cuello, hacia demasiado tiempo que nadie lo tocaba.

—No cuentes con que podrás hacerte de mi cabeza pronto, niño bonito —le dijo—. Y eso de que prefieres a un perro fiel… ¿Es acaso una insinuación, Queen? —se mofó por un momento, marcando ligeramente el nombre acortado del juez. Le hacía gracia que el vampiro le coqueteara o por lo menos esa había sido su impresión después de darse cuenta de la mirada que le había dirigido.

Tenía que admitir que se estaba divirtiendo un poco, por más que quicera permanecer como un ermitaño, la verdad era que le hacía falta el contacto con otras personas. Sin embargo su humor se vino abajo cuando escuchó las siguientes dos frases que le dirigió el Queen of Hearts. Se cubrió de inmediato el brazo con la mano libre, fue un acto reflejo ni siquiera lo había pensado, simplemente se sintió totalmente expuesto al escuchar la palabra cicatriz.

Inmediatamente después recordó esos primeros días como licántropo, cuando todavía no sabia controlar su ferocidad con la misma efectividad que ahora, recordó también la cicatriz que su padre le había infringido, pero sobre todo recordó al último hombre con el que había estado y que le había traicionado: su mentor. Que hacía ya bastantes años había estado dispuesto a sacrificarlo por dinero. Él no lo había herido nunca, por lo menos no físicamente, todas sus cicatrices o por lo menos las más horribles, habían sido hechas por su propia mano. Pero aquel comentario acerca de su último dueño lo había lastimado, no es que se considerara propiedad de su antiguo mentor, pero aun así no pudo evitar la comparación en cuanto escuchó el comentario.

—¿Y tu que sabes de cuidados? —le preguntó, no gritaba, hablaba en un tono normal, sin embargo se le notaba herido—. Seguramente jamás en tu vida has poseído algo a lo que puedas cuidar y si lo has tenido, lo más seguro es que jamás te durara por mucho tiempo —terminó por decir, ya no estaba pensando antes de hablar, se estaba dejando llevar por el dolor. Además tenia una vaga preconcepción de los vampiros, siempre había creído que no sabían amar.

por **Queen of Hearts** Sáb Jul 28, 2012 6:21 pm

Sonrió abiertamente, aquel comentario simple sobre su apariencia era todo lo que necesitaba. Sin embargo no tenía planeado dejárselo saber al otro. - ¿Insinuarme? Creo que me has malinterpretado, en especial porque fui directo.- Parecía ofendido, como si la simple idea de él haciendo tal insinuación hubiera sido horrible, pero estando en un sitio público lo era. Su imagen iba primero. –Realmente necesito un perro fiel que me cuide, personalmente me gustan más las mujeres así que no lo decía con ese sentido que crees.- le dirigió una mirada de reojo, mentía por muy sincero que se escuchara. El comentario si iba con es intención pero eso habría desilusionado a sus fans, y ellas eran encantadoras por la atención que le brindaban. Le gustaban más las mujeres por lo fáciles de manipular que resultaban, solo eso.

Sin embargo al escuchar el comentario final de Renzo se sentía victorioso. Por fin una muestra de debilidad, lo suficiente para que se acercara colocando su mano delicadamente sobre la del otro mirándolo deforma suave. No, no sentía empatía ni le interesaba absolutamente si el otro sufría. No era capaz de saber lo que era ese sufrimiento aun cuando lo causaba muchas veces en otros, se limitaba a observarles fríamente destruyéndolos. Pero eran esas heridas, las que no se miraban las que daban mejores resultados para jugar con los dueños de las mismas. Y el licántropo acababa de hacer la pregunta perfecta para su farsa. Su otra mano dejó caer su hoz, no le tenía mayor aprecio, y la llevo hasta su rostro acariciándolo suavemente.

-¿Acerté? No era mi intención, me merezco tu comentario… -le observo fijamente a los ojos antes de alejarse y voltearse. Actuar era fácil, mostrar un dolor y arrepentimiento que no sentía también. Lo único difícil era no reírse en la cara de aquel antes de conseguir sacarle algo de provecho al curioso escenario. –Claro que nada me dura, soy inmortal. ¿Cuántas veces crees que he visto morir las cosas que cuido sin poder hacer nada? – Una respuesta muy simple, ninguna. -Así aprendí que no tiene caso para mí tener a alguien que cuidar, eso resalta mi inutilidad. Me va mejor solo en compañía del encargado de cuidar el oficio de mi casa.- Se ríe de forma arrogante tratando de disimular como si hubiera recuperado la compostura, que en verdad nunca perdió. –Tenemos un trato justo donde yo no voy a recibir nuevas cicatrices como las que tienes tu. No soportaría acercarme a alguien que no sea fiel y se largue de mi lado en cualquier momento porque algo no le gusta.-

Se agacho a tomar aquel objeto que había dejado caer, pero solamente colocó su mano quedándose ahí. Pensaba que tan convincente podía ser esa mentira, no quería tener que inventar detalles más específicos. –Creo que acabo de dejarme ver más débil que un cachorro llorón, mi orgullo se lo cobrara luego.-

Renzo Ashtorm

por **Renzo Ashtorm** Lun Jul 30, 2012 11:45 pm

Un sudor frio lo recorrió cuando sintió aquellas manos heladas sobre su piel, el corazón le palpitó un poco más rápido por la sorpresa, no se esperaba aquel movimiento por parte del vampiro. Sin embargo, el roce no le agradó, por más suave y tierno que pareciera todavía no estaba listo para confiar en las personas y mucho menos en aquella creatura.
Intentó retirar su mano del agarre y volvió el rostro hacia el lado opuesto en el que se encontraba su acompañante, aunque poco después Queen ya se había alejado.

—Yo también soy inmortal, o por lo menos sé que viviré por mucho tiempo más —le dijo serio—Aun así, a diferencia tuya, ahora que poseo una vida longeva no deseo tener nada, me basta con los recuerdos de mi humanidad.

Se soltó el brazo, sus cicatrices ya habían sido vistas, no tenía caso seguir ocultándolas.
Soltó un suspiro seco y osco, se sentía incomodo compartiendo aquella conversación con el Queen of Hearts. Sonaba tan sincero y sin embargo el no terminaba de tragarse aquel cuento. Además, el deseo estaba enturbiando sus pensamientos, hacia tanto que no tenia ninguna relación carnal y aquel hombre se la estaba entregando en bandeja de plata, o por lo menos sus afiebrados pensamientos le hacían pensar de aquella manera.

—Si alguien se larga de tu lado es porque tu lo provocaste o porque él que te abandona es un idiota. De cualquiera de las dos maneras, no tendrías por qué sentirte mal —le dijo con calma, tomando asiento al lado del tronco en el que el vampiro había estado sentado cuando se conocieron —. En la primera circunstancia porque eres un imbécil que lo merecía y en la segunda, porque el otro no valía la pena —terminó por explicar mientras alargaba el brazo y tomaba una de las envolturas de dulces que seguían esparcidas por el suelo.

Observó al vampiro por un momento, si bien era cierto que había tocado una fibra sensible de su pasado ya había controlado la ira que se había desatado a causa de ello en su interior, lo último que quería era terminar en una estúpida pelea con aquel hombre por cosas que él jamás entendería.

—Y… ¿Cómo piensa cobrárselo tu orgullo? —le preguntó de manera sugerente sin poder evitarlo, tal vez el hombre era un imbécil y era claro que el lobo no se había tragado casi nada de su discurso, pero ya que había perdido su botín de golosinas, no tenía nada más que hacer, que ver si podía conseguirse algún otro tipo de recompensa.

Queen of Hearts

por **Queen of Hearts** Sáb Ago 04, 2012 1:53 am

Un pequeño cachorro herido, esa era la imagen que proyectaba Renzo. Quizá él no la notara, posiblemente habían muchos que la confundieran pero aquel vampiro había aprendido a disfrutar tal expresión del alma. Él no poseía una, al menos no de la forma en que los seres vivos lo hacían como hacía tanto que lo comprendía. Era esa carencia de alma lo que le exhortaba a ser cruel, a tocar las heridas con paciencia y cuidado hasta que la poca posibilidad de cura se volviera nula. Aunque no siempre era tan efectivo, siempre resultaba placentero.

-Los recuerdos se borran…al menos en mi raza eventualmente lo hacen.- Su voz con un tono lamentable contrastaba con el poco interés que le causaba el tema. Ciertamente había escuchado que algunos olvidaban con el tiempo, él no precisamente. Y por eso cuando escucho la explicación de porque preocuparse sobre el tema era inútil simplemente soltó una risa, una controlada pero que parecía ser sincera. Se volteo para que sus ojos se dirigieran firmemente a los de su acompañante. –Eres un poco cruel, no todos los vampiros son como lo cuentan las historias y yo me incluyo.- Bajo la mirada, los ojos a veces podían traicionar a un actor que se estaba dejando llevar por instintos y no por su razón. –También hay una tercera posibilidad, la muerte. No todos somos inmortales, perder a alguien porque su hora llegó no implica culpa de nadie pero hace mucho daño…- Y es que si al decir aquellas palabras Renzo se fijaba en sus ojos notarían que aquella idea le causaba placer, pues el dolor que había encontrado en tales circunstancias no le pertenecía.

-Por eso es mejor si evitamos ese tema, hoy se supone que es un día para disfrutar de la compañía de otros aunque no sea mi mayor placer.- Lo dijo señalando el escenario que se levantaba en el fondo del claro al cual algunas personas comenzaban a acercarse, pese a que Queen había elegido un lugar con apropiada distancia. –Por que además no pienso explicarle a un desconocido algo tan personal como las heridas de mi orgullo… pese a todo sigue siendo el de un vampiro que se precia a si mismo por su encanto y autoestima.-

Volvió a acercársele, sin mostrar duda, era un mentiroso compulsivo que apenas lograba distinguir cuando sus instintos respecto a eso actuaban antes que su mente. –Eso me hace recordar algo que me hiciste pensar… tienes muy mal gusto con los dulces. Podrías haber tomado menos pero de mejor calidad.- Sonrió señalándose los labios como si hiciera una supuesta referencia a las dos golosinas que había consumido anteriormente… o quizá no. –Me hace pensar que eres un poco… ¿inculto? ¿Bárbaro?¿ermitaño? no encuentro la palabra correcta… -

por **Renzo Ashtorm** Sáb Ago 04, 2012 6:29 pm

—Pues mis recuerdos siguen intactos —respondió escuetamente, endureciendo sus facciones una vez más. Para él era sumamente difícil olvidar el pasado, de hecho, era todo lo que ocupaba su mente la mayor parte del tiempo. Excepto cuando viajaba por trabajo, entonces se tenía que concentrar en otras cosas para no ser asesinado.

—No se si todos los vampiros son iguales, no puedo asegurarlo, pero los que yo he conocido no son muy distintos los unos de los otros —le dijo mostrando una pequeña sonrisa sarcástica, la cuál le sentó muy bien a su rostro que casi siempre estaba ausente de expresión o por el contrario, contorsionado por el disgusto.

—Eso me parece bastante difícil, no veo como estar con alguien pueda proporcionar algún tipo de placer. Mucho peor si es una multitud la que te rodea —dijo, obviamente esa era una mentira que de tanto repetirse, había comenzado a creerse de verdad. No es que a Renzo no le gustaran las personas, es que prefería alejarlas antes de que algo terrible ocurriese, como encariñarse con ellas y después ser traicionado. También lo hacia para evitar el rechazo, prefería alejarse primero, a que los demás lo abandonaran a él.

Se acomodó en el pasto, aún con la golosina en la mano, comer era un placer que le gustaba retrasar. —¡Bah! Si no quieres esta bien, yo no te voy a obligar —le dijo, mientras le dirigía una mirada directo a los ojos, ¿realmente estaba hablando del orgullo todavía?

—¿Tu crees? —le preguntó alzando las cejas—. ¿Entonces porque no me enseñas a escoger mejor? Tal vez así se me quite lo bárbaro y lo ermitaño — le dijo serio, después, se metió en la boca lo que restaba de la golosina. No le había gustado lo de inculto, las otras dos cosas no le importaban, después de todo, había algo de verdad en aquellas palabras.

por **Queen of Hearts** Sáb Ago 04, 2012 7:36 pm

Iba a admitir que su impresión inicial de que aquella actividad sería aburrida estaba cambiando, aunque no le gustara estar en público. Era una figura pública, debía mostrarse apropiado porque las miradas estaban sobre él y de lo contrario perdería muchos de los favores de las personas. No era vergüenza o miedo, simplemente que sabía lo que era aprovechar los beneficios de una imagen publica bien definida. Y esa era la razón de que mirara los alrededores, las personas estaban más interesadas en lo que sucedía sobre el escenario que en las dos personas aisladas del resto.

Sonrió al ver como el Renzo introducía la golosina en su boca. No habría definido al lobo como su tipo, pero cualquiera que pudiera ser beneficioso lo era. –Por qué no creí que tuvieras interés en continuar en contacto con un vampiro.- Discretamente se acercó, agachándose justo al lado del otro observándolo con una fingida sonrisa. ¿Hacerlo o no? ¿Ganarse un pequeño perrito faldero o no arriesgarse a un escandalo? –Tal vez solo eres tan simple como un ruidoso y molesto niño.- Sus dedos recorrieron su mejilla, sintiendo que lo difícil del reto era el verdadero motivo de que se dejara llevar un poco por sus instintos. No era la primera vez que sobrevivía un pequeño escandalo.

Una última mirada disimulada a los alrededores le confirmó que no había miradas que le reconocieran especialmente en apariencia. Su rostro se acercó al del otro uniendo sus labios con los del contrario, forzando su ingreso hábilmente pues no era la primera vez que hacía algo similar. El contacto y la invasión no duró mucho, apenas recorrió los alrededores cortamente alejándose con la misma soltura de que si no hubiera estado haciendo algo inapropiado o con descaro. Poniéndose de pie arreglando su cabello que por el movimiento había caído sobre sus ojos, relamiendo sus labios sutilmente sintiendo el sabor de la golosina de antes.

-Así es como puedes obtener placer de otra persona, lo prohibido… es un extra muy agradable- Sonrió dirigiéndole una mirada seductora pero teniendo el cuidado de alejarse lo suficiente, la distancia impuesta le aseguraba cierta oportunidad e evitar la imprevista reacción del lobo –Si no lo sabes quizá ermitaño sea apropiado para nombrarte.-

por **Renzo Ashtorm** Sáb Ago 04, 2012 10:32 pm

Renzó se quedó quieto cuando el vampiro se le acercó, observándolo directamente a los ojos, en especial cuando sintió aquella caricia. La verdad era que Queen tampoco era de su tipo, ni su físico ni su personalidad le habían atraído en un principio, pero al igual que aquel hombre uno no iba a desperdiciar una oportunidad si la tenía justo enfrente. Además seguramente sería como todos los demás, solo tendría que aguantar aquel olor que le desagradaba tanto un poco y después no lo volvería a ver jamás. O por lo menos eso era lo que pensaba en aquel momento.

—Estoy interesado en pasar un buen rato —le dijo indiferente, acomodándose en su lugar, doblando ligeramente las piernas para conseguir una posición más cómoda. Al segundo comentario simplemente respondió con un gruñido. El jamás era ruidoso, molestó posiblemente.

Se dio cuenta de como el hombre miraba a los costados, por lo que lo imitó, pensando que había visto algo importante, pero no encontró nada. Las pocas personas que pasaban por ahí estaban arremolinadas alrededor del espectáculo central, no les prestaban atención alguna. Si acaso habría alguna ardilla cerca, podía oler algo similar a eso, tal vez un topo.

El beso lo tomo por sorpresa al estar tan distraído, definitivamente no se lo esperaba, no ahí. A él no le preocupara que alguien lo viera, no tenía ninguna reputación que cuidar, pero se sorprendió de que al final el vampiro hubiese decidido ceder ante aquel capricho. A penas estaba comenzando a disfrutar del contacto cuando Queen se separó, dejando un sabor extraño en su boca, él podía sentirlo más haya del que la golosina le había dejado momentos antes.

Sus manos intentaron retenerlo, pero ya era muy tarde, permanecía apartado de él, seguramente porque pensaba que tal vez lo atacaría por el atrevimiento.

—Si pensara atacarte, no te habría seguido el juego —le dijo algo molesto, no iba a admitir que no le había gustado la repentina separación. Se puso de pie con aquella frase y le dirigió una mirada afectada al vampiro, aunque aquella solo duró unos cuantos segundos.

—Ermitaño me parece apropiado — comentó indiferente, metió sus manos en los bolcillos del pantalón y apartó la vista de Queen fijándola en un punto indefinido a su izquierda.

por **Queen of Hearts** Sáb Ago 04, 2012 11:28 pm

-Si planearas atacarme te mataría primero- Sus palabras salieron por simple reflejo como una respuesta. Lo sabía, Renzo podía actuar arrogante o tratar de mantener su apariencia de ser fuerte pero cedía muy bien al contacto. Mentir diciendo que no quería poner a prueba hasta donde llegaba eso, era algo estúpido pero no planeaba hacerlo ahí cuando acababan de encontrarse. Tomarse con calma todo iba a complicarle la vida pero lo necesitaba, debía aguantarse o solo iba a ser un encuentro casual de una vez. Quería utilizarlo hasta que ya no tuviera ningún uso, no solo medio disfrutarlo.

Sin embargo jamás imagino como el lobo aceptaría fácilmente su condición. Le dirigió una mirada de asombro, sin tratar de ocultar ningún gesto para terminar riendo. Iba a destrozarlo poco a poco, rompiendo sus esperanzas hasta que le obedeciera ciegamente. Quería hacer suyo a aquel insolente hombre que tenía cerca, su nueva marioneta sin mucha decisión propia. –Temía más que fueras a querer continuar… entregarse en la primera cita en la primera oportunidad te haría ver como un fácil.- continua riendo observándolo, sin lograr definir vergüenza o confusión en el gesto de evitar la mirada dirigiéndola a otro punto.

-Además quiero tu respuesta ahora… no me gusta perder mi tiempo personas que planean dejarme luego.- Aunque su voz había cambiado a un tono imponente y serio, además de haber borrado la sonrisa de sus labios, sus mentiras seguían saliendo de su interior como lo más común. –No me importa que seas un cachorro aún… puedo tomarme la molestia de enseñarte. ¿Pero te convertirías en fiel perro a mi lado.- Mantuvo su mirada fija, delineando el perfil de aquel por el simple gusto de no olvidar como era ahora y en lo que esperaba convertirlo más adelante.

Un suspiro escapo de sus labios calculadamente. –No busco nada serio en ningún sentido si eso te preocupa… algo de compañía y diversión me es suficiente por ahora. Pero si aceptas no planeo dejarte ir cuando te de la gana aunque seas un perro sarnoso y mal cuidado.- Una sonrisa cruel se le escapo, en verdad le era imposible sonar siempre como alguien suave y bueno con aquel, le gustaba insultarlo y decir palabras frías, debería ir disimulándolas mejor luego. Si, estaba más que seguro que sin importar la respuesta habría un luego al cual recurrir.

por **Renzo Ashtorm** Lun Ago 06, 2012 3:51 pm

Sonrió condescendiente, tal vez el vampiro era bueno defendiéndose, pero él no se quedaba atrás, así que dudaba que pudiera matarlo tan rápidamente como pensaba. Sin embargo, no hizo ningún aspaviento, que pensará lo que quisiera, a él le daba igual.

Volvió a fijar la vista en Queen cuando escuchó su risa, abrió los ojos sorprendido para después aguzarlos con un poco de resentimiento en sus pupilas, odiaba que se burlaran de él. Apretó la quijada tratando de controlar su instinto de saltarle encima para acallarlo, sobre todo cuando el hombre dio en el blanco al pensar que él quería continuar a pesar de recién haberse conocido. Maldijo su libido en la mente, eh intento acallar los regaños de su conciencia.

-Si me acuesto contigo no te aseguro volver o estar ahí al día siguiente- le dijo mortalmente serio, y era verdad, en ese momento no tenía ningún interés por pasar más que unas cuantas horas con el vampiro. -¿Porqué tendría que soportarte si insistes en llamarme perro faldero? – le pregunto contrariado ante la insistencia de aquel sobrenombre. No le había quitado los ojos de encima, sus pupilas color índigo parecían dos cuchillas afiladas en ese momento, efecto que era acentuado por el rictus de su boca.

-Si sigues llamándome sarnoso, no entiendo cuál es el interés entonces – comentó con calma, aunque en su cara se notaba que se encontraba perturbado.

Le dio la espalda caminando un poco, permitiendo que sus pies descalzos tocaran el pasto. A Renzo le gustaba andar sin zapatos cuando no se encontraba dentro de ninguna misión como caza recompensas, ere un pequeño placer culpable que se permitía siempre que podía.

Respiró profundo, como para tranquilizarse y pensar un poco. ¿Por qué estaba ahí todavía? Ya debería haberse largado de una vez por todas, la actitud del hombre que lo acompañaba era suficiente como para provocar que decidiera irse sin siquiera dirigirle una mirada. Pero había algo en su apariencia y su forma de hablar que le hacían sentir ganas de darle su merecido, tal vez por eso no se había retirado. O tal vez era porque en el fondo era un superficial que se había dejado llevar por la apariencia del niño bonito.

Volvió el rostro un poco y observó al vampiro sobre su hombro – ¿Cuándo y dónde? – preguntó entonces, colocándose la máscara de indiferencia una vez más.

por **Feena A. Volkova** Lun Ago 06, 2012 11:26 pm

No lo sabía a ciencia cierta, es más, ni en su más loco sueño se le hubiera ocurrido ir a un Festival de la Milanesa con Papas. Para la lógica y sentido común de Feena aquello no tenía ni el más mínimo sentido y solo podría ser creación de un lunático. Es decir, de acuerdo, dicho platillo era delicioso pero ¿hacer tanto alboroto como para crear un festival que suspendiera todas las actividades? No tenía razón de ser. Sin embargo, yendo en contra de todos sus pensamientos, la muchacha estaba ahí, observándo de todo lo que pudiera haber de llamativo ahí; desde sujetos vestidos de patatas hasta diveras mesas con comida al "honor" a la milanesa con papas.

No sabía que era peor, que hubiera un festival asi o que ella estuviera en el. Y bueno, quizás Feena estaba siendo muy negativa pero no podía más que mirar todo a su alrededor con una perfecta poker face. Incluso un facepalm podía pronosticarse, uno que sin duda aparecería en cuanto ella viese algo ridículo. Luego recordó a Ilyusha, "mascota" que semanas atrás había adquirido, misma que resultó una compañía perfecta y su convivencia era más que ideal. Sonrió ladina al ver en su mente al chico de plateados cabellos entenderse con las plantas que tenían en el jardín del lugar donde habitaban. Posteriormente, Feena pensó que a él le hubiera gustado estar con ella, especialmente por que era un bosque y él podría maravillarse.

Un fuerte ruido captó la atención de la pelinegra y sus azules orbes se direccionaron hacia la ubicación de tal sonido: eran fuertes carcajadas por parte de un grupo de no más de 13 personas divirtiendose en juegos, los cuales eran organizados por un representante. Ella, sintiendo curiosidad, decidió ver un poco. La sorpresa no se hizo esperar y es que realmente se debía admirar el ingenio para que todad esas "competencias" estuvieran directamente relacionadas con la milanesa o las papas. Feena se permitió reir levemente, el día no podía ir más bizarro pero quizás resultaría tan malo.

Misha Kozar

por **Misha Kozar** Mar Ago 07, 2012 11:44 pm

Estaba divirtiéndose como lo hacía siempre, riéndose honestamente por la cara tan extraña que hacía uno de sus amigos para tomarse la foto con una imitación de papa gigante decorando una de las mesas. La verdad es que en cuanto un volante sobre el evento llego a sus manos quería ir, cualquier actividad que llevara la palabra festival le picaba profundo para ir a pasar un buen tiempo con quien fuera. En realidad las personas con las que estaba en aquel momento eran simples extraños a los que se acercó para obtener compañía, en realidad todos ellos eran como esos personajes que no llegan ni a secundarios en un cuento y solo sirven para pasar algun aprueba o algo así, desapareciendo por completo todo resto de su existencia luego. Si, así eran ellos más por como actuaba cualquiera creería que eran amigos muy queridos.

La siguiente actividad era una obra que se llevaría a cabo en el escenario del bosque, así que logro convencer a los demás de ir, dejando atrás la parte central del festival. Llegaron rápidamente entre bromas y alguna que otra galantería por parte del Ángel quien había encontrado interesante el físico de un chico en el grupo. Sin embargo no es que fuera enserio, simplemente era uno más de esos recuerdos que es agradable contar cuando estas en una reunión de amigos cercanos, haciendo que todos se rían.

Había algo de animosidad por parte del público ya presente en el lugar, y Misha no ayudaba caminando despreocupadamente señalando una y otra cosa de las que adornaban. -¡Esa papa es como un huevo!- Reía por el comentario que había hecho, en realidad estaba pensando en otra cosa sin notar realmente lo que acaba de decir. Pero su distracción hizo aparición nuevamente logrando que se tropezara con un sujeto que era mucho más fornido, y de susto de pensar que podía hacerle algo retrocedió perdiendo el equilibrio cayendo de espaldas sobre otra persona, haciendo que ambos fueran a dar al suelo. Era una de esas caídas que se hacían comunes al mezclar mucha gente y su falta de atención. Abrió los ojos que cerró por el choque y volteo a ver a la otra persona, una muy linda chica a la cual sonrió encantador pero informal. –Perdona, soy un completo desastre no fue mi intención.- Riéndose nuevamente al descubrir la forma tan graciosa en la cual la otra había caído.

FEENA

por **Queen of Hearts** Miér Ago 08, 2012 12:22 am

No le gustaba en absoluto que aquel tuviera tal descaro para tratarlo de forma indiferente, más bien de negarse a responder directamente lo que había propuesto. ¿Por qué seguía resistiéndose si era mu y obvio lo que ambos querían, al menos de momento. Arrogante, soberbio y vanidoso reía solo para disimular el que estuviera deseando clavarle aquella hoja filosa en el cuello más el rojo no era el color que más quisiera apreciar aquel día. Se contuvo recobrando la compostura.

Contra cualquiera de las posibles reacciones lógicas se asomo hasta la espalda del lobo pasando los dedos sobre la ropa hasta llegar a su parte baja terminando completamente la línea vertical. –Me soportarías porque es muy notorio como tu cuerpo me quiere… y lo de solo una noche no tengo inconveniente.- Su mano volvió a subir retirando el cabello de su nuca para rozar el cuello desde el frente con su fría piel. Se alejó luego unos pasos, no podía hacer más por convencerlo de que se quedara antes de responder la pregunta, pues se vería aun peor de lo que ya había hecho hasta entonces sobre excediendo sus límites.

Se dio media vuelta caminando dos pasos al lado opuesto antes de voltear su rostro con una gran sonrisa. –Ahora, si te vas no pienso estar esperando por ti nunca… Lo de si será una noche o mi perro fiel lo veremos luego si quieres. El lugar, tu decides si público o privado.- Tras decir eso se acercó a la mesa que tenía varios bocadillos tomando un poco de agua simplemente, resignado a que no había absolutamente nada mejor que beber sin usar sus colmillos.

Se sentía confiado de que el lobo volvería, al menos por la oferta de pasar el rato juntos. Pero a decir verdad si se equivocaba cabía la oportunidad de que lo buscara luego, por el placer de hacerle la vida imposible en la ciudad hasta que aprendiera a no negarse ante las propuestas de alguien con tal poder.

Renzo Ashtorm

por **Renzo Ashtorm** Miér Ago 08, 2012 10:31 pm

Sonrió al escuchar que el vampiro aceptaba su condición, creyéndose vencedor de la partida. No tenía idea de cuan equivocado estaba.

Recibió la caricia de Queen con un escalofrió que le recorrió todo el cuerpo, uno que evidenciaba que en efecto su cuerpo lo quería aquel día, justo en ese momento. Se relajó en cuanto el vampiro se separó y se dio la vuelta para observarlo de frente, ignorando el comentario del perro fiel, ya que si le prestaba atención terminaría por decidir que lo mejor era irse.

Acortó el trecho que los separaba en cuatro pasos largos y lo sostuvo por la muñeca que sostenía la guadaña. —Ven conmigo —le dijo con voz ronca y segura. —Podemos ir a la ciudad, todo mundo esta aquí y no creo que no ten que faltas. Ya te exhibiste lo suficiente por hoy — le dijo con tranquilidad, soltando el agarre y poniéndose recto, esperando una respuesta.

Queen of Hearts

CAMBIO DE TEMA

por **Queen of Hearts** Miér Ago 08, 2012 11:26 pm

Lo primero que pensó al notar como aquel sujeto despreciable se atrevía a tomarlo de esa forma por la muñeca era que iba a hacerle rodar la cabeza. Estaba por hacerlo cuando lo escucho, por poco dejando escapar una risa sonora por todo el lugar. Aquel patético lobo estaba preocupándose por él, sabía que tenía la guerra ganada aún si había tenido que ceder por ahora respecto a las condiciones. Asintió calmado suspirando con una resignación más que evidente.

-Era innecesaria mi presencia aquí, puedo irme cuando quiera. Pero es verdad, la ciudad podría ser un buen lugar pero…. Dudo que alguno quiera llevar al otro a su casa.- Observo los alrededores en silencio, comenzaba a llegar más gente y era pésima idea continuar ahí para lo que pretendía hacerle a su futuro nuevo entretenimiento. –Hay un hotel que sabe ser discreto. Vale lo que cobra, supongo que invitare yo.- Una mirada insinuante fue hasta los ojos de Renzo antes de comenzar a caminar en dirección a la ciudad previo a detenerse un momento. –Yo no sigo a nadie, porque eso no tendría sentido. Hay mucho que aún debes aprender…-

Continuo su camino, sin siquiera dudar por un momento que estaba siendo seguido, ambos querían ese encuentro más de lo que cualquiera estaba dispuesto a aceptarlo jamás en su existencia. La diferencia era que Queen no lo aceptaba en público, pero con respecto a lo que era su vida personal conocía demasiado bien sus impulsos, necesidades y quizá incluso caprichos sin relevancia alguna para su vida. Claro, quizá estaba confundiendo un capricho con algo diferente, pero si él lo decidía así debía serlo.

CAMBIO DE TEMA

por **Feena A. Volkova** Dom Ago 19, 2012 11:43 pm

De acuerdo, el día no parecía ir tan mal. Feena había logrado divertirse observando los juegos que hace rato había encontrado al mismo tiempo en que admiraba la creatividad de quien fuera que hubiese organizado tales actividades. Era bastante entretenido ver a las personas competir para ganar un trofeo con forma de patata, ya fuera corriendo en una pista de obstáculos o proclamando ganador al sujeto que pudiera comer más milanesas en determinada cantidad de tiempo. Cuando Feena decidió que era suficiente continuó su recorrido por el festival para que, al cabo de unos minutos, su atención fuera captada por lo que parecía ser una obra de teatro montada en el escenario del lugar. Ella sintió curiosidad y se acercó, adivinando sobre que podría tratarse la representación que estaba por iniciar.

El resto de la gente que al igual que ella estaba reunida ahí para la obra se veía muy animada, incluso ella notó a un grupo de personas que se la pasaban de carcajada en carcajada, sin embargo, no era como si Feena sintiera el interés por saber de que iba el ambiente tan animado que ellos emanaban. Para nada. Entonces ella dirigió su vista al escenario, preocupándose solo y unicamente por ella, justo como siempre hacia... Hasta que llego Ilyusha, pero claro, Ilyusha no estaba acompañandola esos momentos por lo cual retornar a la "vieja Feena" no sentaría mal.

Luego de un rato se encontró totalmente perdida en la obra, con el 100% de su atención ella, a tal grado que ni siquiera se dio cuenta del "alboroto" que tomaba lugar al lado suyo, y cuando lo hizo, ya estaba tirada en el suelo con un hombre encima suyo. Al principio le costó reaccionar, era como si tratase de asimilar la situación para después separar con todo lo que le permitirían sus brazos al muchacho que tenía sobre sí. El rostro de la pelinegra tenía una expresión molesta, e incluso resultaba fácil notar su ceño fruncido y una irritada mueca.

- Se nota que lo eres. -Respondió lo que primero llegó a su mente sin deparar en lo que exactamente estaba diciendo, sin embargo, su rostro cambió totalmente al ver la cara del muchacho, le resultaba tan.. parecida a él. - Está bien. No te preocupes. -Agregó levantándose por su cuenta, quedándo unos centimentos más abajo del rostro del chico. - Supongo que no volverá a pasar, ¿verdad? - Le miro con sospecha, no tanto por el hecho de que el quizás podría volverla a tirar al piso, sino por el parecido que él tenía con Ilyusha. - De acuerdo, ya puedes... Um, volver con tus amigos, supongo.

Tan cortante.. Justo como la vieja Feena.

Misha Kozar

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